Preciosos momentos los que pasamos en el estudio con Alvaro, un bebe que transmitía una paz y tranquilidad enormes, incluso diría que confianza y seguridad en su mirada. Fue un verdadero placer observar como caía dormido en un sueño profundo y como sonreía mientras soñaba, por cierto ¿qué soñaría? Mi agradecimiento a su madre y a este pequeño por hacerme disfrutar de estos momentos que me recuerdan porque amo y realizo este trabajo. Os dejo con una breve muestra de la sesión.
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